El reparto de la cosecha

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Una vez, un zorro y un quirquincho compraron un campito en sociedad; el zorro puso la plata, el quirquincho participo con su trabajo.
Hagamos un trato dijo el zorro que se las daba de muy astuto vos siembras y te quedas con lo que crece del suelo para abajo. Yo me quedo con lo que crece para arriba.
El quirquincho no tenia ni un pelo de tonto, sembró papas. Cuando llego el momento de la cosecha, le dio las plantas al zorro y se quedo con las papas.
El zorro se puso furioso y grito: no me vas a embromar mas esta vez, lo que crezca para debajo de la tierra será mio; vos quédate con lo que crezca arriba.
Entonces el quirquincho sembró y trigo cuando llego el momento de la cosecha, embolso el trigo y le dejo al zorro el rastrojo.
Así que me tomas por tonto, pensó el zorro, espera nomas, que esta vuelta te gano yo. Y le propuso un nuevo trato: ahora me toca a mi sembrar y si no adivinas el nombre de la planta que salen, el campo va a ser mio; si aciertas, será tuyo. Te doy tres oportunidades. Y sembró algo que cuanto mas crecía  menos lo conocía el quirquincho. Llego el día fijado para adivinar.
Son porotos dijo el quirquincho
Erraste… vas mal le contesto el zorro
Son chauchas
Tampoco me parece que el campo va a ser mio
El quirquincho no se dio por vencido y pidió dos días más de plazo para pensarlo mejor. Su socio, que se sentía muy seguro de ganar, acepto. Esa misma noche el quirquincho le piso el sembrado. La noche siguiente se metió en un barril y así disfrazado fue a revolcarse por el campo. Sabía muy bien que el zorro estaría espiando para ver quien le estaba haciendo destrozos. Así fue al ver ese bicho tan raro, el zorro se asusto y sin atreverse a salir de su escondite grito: ¿Quién ese bicho que se revuelca sobre mis lentejas ¿ el quirquincho riéndose para sus adentros siguió rodando en el barril, pero el zorro no se animo a seguirle.
Al día siguiente en cuanto los dos se enfrentaron, el quirquincho dijo triunfantemente:
Ya se son lentejas
Y el otro solo pudo contestarle
Caray, me embromaste….
Desde entonces decidió no hacer nunca más tratos con quirquinchos.  
Andrea Micaela Quiroga 2 “B” Bachiller

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